Ya tenemos el título de la canción, la temática sobre la que vamos a hablar y un estribillo. ¿Empezamos a darle alguna vuelta a las estrofas?

Hay palabras que tienen más peso que otras
«El miedo a decir lo que pensamos». Con esta frase resumimos en su día la temática de nuestra canción. Ahí hay una palabra que tiene mucho peso, y esa palabra es miedo; es más potente que el resto de palabras de la frase. Vamos a centrarnos en ella para empezar.
Queridos amigos de los pepinos, hace mucho que no os propongo ningún juego, así que… vamos a decir imágenes que den miedo. ¿Qué os viene a la cabeza cuando escucháis esa palabra?
Ponme un ejemplo, que ayer salí hasta tarde.
Ejemplos de imágenes que dan miedo
No es necesario que sean estereotipos, pero yo voy a utilizar uno bastante mítico para ilustraros: una niña con traje de comunión en medio de la carretera, con el pelo tapándole la cara; y a las 3 de la mañana. A ver quién es el chulo que se baja del coche.
¡Joder! ¡Qué miedo!
¿Veis el efecto? Simplemente es una imagen, una situación. No estáis allí, estáis aquí leyendo mi blog, pero se os ha pasado por la cabeza esa sensación de miedo. Si queremos que la canción hable del miedo, estaría bien provocar esa sensación en el oyente, ¿no os parece?
Me parece bien. ¿Qué tengo que hacer?
Decidme cosas que os den miedo. Bueno, si sois muy valientes, como yo, y no hay nada en el mundo que os dé miedo, decidme cosas que le den miedo a otra persona. Puede ser miedo en plan «ay, que me da cosilla» o en plan «joder, casi me cago encima». Vale todo.
¿Cómo te lo digo?
Como siempre, para contarme vuestras movidas podéis utilizar los comentarios del artículo o el Twitter. Para los tuiteros, utilizaremos el hashtag #QuéMiedoPepino.
A mí se me ocurren estas dos. Bueno, en realidad a mí no me dan miedo, pero tengo un amigo al que sí. Ahora las tuitearé:
- Estar nadando en un pantano y que algo te roce las piernas.
- Una carta con una amenaza de muerte.
¿Y a ti qué te da miedo?
Da miedo quedarse en un ascensor encerrado con un tio disfrazado (en Halloween, por ejemplo). O encontrar una araña en tu cuarto y estar sola en casa. O estar sola en una casa en medio del campo y escuchar ruidos de puertas o ventanas (igual solo es el viento, pero …). Y miedos, no tan «materiales», la soledad como modo de vida, o el temor de una vida sometida por alguien, que te obliga a vivir de una manera. No sé.
Lo del ascensor daría más miedo si no fuese Halloween… aunque también dependería de qué fuera disfrazado ;)
…si te encuentras con la calabaza putilla, no sería miedo el primer sentimiento :-p
Nos estamos yendo del tema, pero es cierto que los disfraces de halloween en los últimos años dan de todo menos miedo :)
Halloween es un evento erótico-festivo. Eso es así :)