Qué te iba a decir… ¿te importa dejarme tu bajo?

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¿Quién no se ha topado alguna vez con esta entrañable circunstancia? Queridos amigos, para dar un concierto en calidad de bajista es necesario tener un bajo. Esto, que parece tan obvio, resulta que no lo es. Os pongo en situación, para que veáis a qué me refiero.

pregunta dejar bajo
¿Me lo dejas, porfa?

Acaba de terminar tu prueba de sonido y estás guardando tu bajo en su estuche, cuando alguien se te acerca por la espalda sigilosamente y te formula esta inquietante pregunta:

«Ey, tío, qué te iba a decir… ¿te importa dejarme tu bajo, que es que (rellenar con alguna de las excusas que hay más abajo).

El final de la frase es absolutamente imprevisible. Espérate cualquier cosa, porque vale todo. El abanico de salidas es tan amplio que es imposible enumerarlas todas; vamos, es que necesitaría otro blog sólo para esto.

Así que lo que voy a hacer es citar algunas de mis salidas favoritas y explicar cuál suele ser mi reacción en cada caso. Es fundamental replicar deprisa y con firmeza. Lo que pretendo es ayudarte, por si algún día te ves metido en una de estas tesituras y no sabes qué hacer. Tienes mi permiso para utilizar estas técnicas siempre que quieras.

Seguro que tú también tienes tu salida favorita; no dudes en compartirla conmigo en los comentarios.

Vamos al lío. Te recuerdo que la frase era ésta:

«Ey, tío, qué te iba a decir… ¿te importa dejarme tu bajo, que es que…

… el mío lo tengo en el lutier?»

Si tu frase termina así, yo contraatacaré con otra pregunta: «¿En qué lutier?». Si tu respuesta es algo como «Ehhh… ná, no creo que lo conozcas», sabré automáticamente qué es lo que ocurre: que no tienes bajo.

… yo no tengo?»

El caso anterior, pero con una gran dosis de sinceridad, lo cual se agradece. Aun así, no deja de ser acojonante.

… el mío es una mierda?»

Seguimos con la sinceridad por bandera. Y además, con pruebas fehacientes que lo demuestran. Si encima me ofreces tu bajo para que lo compruebe con mis propias manos, no me quedará otra que decir «Tienes razón, es una puta mierda».

… el mío está desoctavado?»

Ésta me encanta, lo reconozco. Si me dices eso, me tienes ganado para siempre; pero no como bajista, sino como humorista. Es una variante más técnica y elaborada de «el mío es una mierda». En este caso lo que haré será apuntar tu nombre en mi agenda como «El desoctavado». Y nunca te cogeré el teléfono.

La excusa irrefutable

En fin, voy a concluir con la excusa irrefutable que suelo utilizar yo para no dejarte mi bajo:

«Es que este bajo no es mío, es de Roger Woki. Llámale y, si él está de acuerdo, yo te lo dejo».

¿Que no tienes el teléfono de Roger Woki? Pero bueno, ¿qué mierda de bajista eres tú?

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2 comentarios en «Qué te iba a decir… ¿te importa dejarme tu bajo?»

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